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Los tecuas quieren hacer una película de pandillas. Las chicas se escapan de clases para poder grabar. La Muñequita se ha salido de su pandilla porque La diabla quería meter a unas minitas y nada que ver. Asaltos, peleas campales y asaltos, las cosas se salen un poco de control. Les cineastes se asustan.

Durante el estallido social chileno, tres cineastas conocen a Ettiene, un niño de 7 años, que le tiene más miedo al fuego y a las protestas que a la policía. Los días siguientes, su compañía les da otra mirada sobre lo que pasa en las calles, mostrando las profundas grietas que separan al país.

Un primer ejercicio de apropiación audiovisual.

La Policía boliviana hizo un live-stream durante la pandemia de covid-19. El objetivo de este video era amedrentar la población para que no salga de sus casas, mostrando las "consecuencias" para lxs infrictorxs.

Durante la crisis política y social de 2019 en Bolivia, gracias a la inmediatez de acceso a las imágenes, se ha dado una normalización del consumo de las imágenes de violencia a gran escala. La manipulación de los adeptos a diferentes discursos políticos han utilizando estas mismas imágenes disponibles en internet, las han modificado para sistemáticamente para manipular a las personas para que apoyen sus intereses.

En ese contexto la película trata de mostrar las imágenes evidenciando la violencia, subrayandola en el texto, a través del subtitulaje. No hay donde perderse: es lo que se dice, lo que se hace mientras se lo dice...

Provocativo documental que expone una mirada personal sobre la estigmatización producida por las fuerzas policiales y el Estado en el actual acervo xenófobo. A través de material de archivo encontrado, la película busca establecer un mapa del monitoreo social disponible a través de Internet, mientras sigue el recorrido de dos merodeadores a través de la noche. Uno de ellos seguramente será detenido.

Los tecuas quieren hacer una película de pandillas. Las chicas se escapan de clases para poder grabar. La Muñequita se ha salido de su pandilla porque La diabla quería meter a unas minitas y nada que ver. Asaltos, peleas campales y asaltos, las cosas se salen un poco de control. Les cineastes se asustan. 

En una noche de mayo, hace siete años, Rafael estaba llegando a casa desde el trabajo. Cuando estaba abriendo la puerta, alguien llamó su nombre. Miró hacia atrás y vio a personas que no conocía. Rafael dejó su casa llevado por las personas desconocidas y nunca regresó. Desde entonces, vive como si esa noche nunca hubiera terminado.

Los niños del West End aprenden a contar hasta Uno

El ruido que hace una motosierra. La tierra removida donde crecen los pinos recién plantados. El quechua que se habla en los andes bolivianos. Los árboles, las personas, las máquinas, el dinero. La tensa y frágil relación que se establece entre ellos. Un bosque en las montañas. Los conflictos que hacen un territorio.

En la ficción, una chica se recuesta en una cama. Acciones que una actriz y un equipo repiten varias veces, hasta llegar al plano deseado por un director amateur. Lo que ocurre detrás de cámara suele ser más interesante que lo que está delante.